McKayla Maroney sobre los abusos de Nassar: "Creí morir"
El juicio contra el médico del equipo de EE UU toca a su fin y se expone a entre 40 a 125 años de cárcel por delitos sexuales contra más de 140 gimnastas.
El juicio contra Larry Nassar, el médico del equipo de gimnasia estadounidense, toca a su fin en un tribunal de Michigan. Se expone a entre 40 y 125 años de cárcel por las acusaciones de haber abusado presuntamente de más de 140 niñas durante casi veinte años. Entre ellas, la gran estrella de Río 2016, Simone Biles, que fue de las últimas en dar el paso de reconocer las vejaciones a las que le habría sometido el médico, que ya ha sido condenado a 60 años por delitos de pornografía infantil.
Valientes, por el tribunal han ido desfilando 105 de sus víctimas. Con relatos que ponen los pelos de punta. "Creí morir aquella noche", declaró por escrito McKayla Maroney recordando un viaje a Tokio en el que Nasser le habría administrado un somnífero. Cuando despertó, estaba intentando abusar de ella. "No es un médico, es un pedófilo. Me ha dejado cicatrices mentales que no desaparecerán jamás", advirtió Maroney, hoy con 22 años, que fue campeona olímpica por equipos y plata en salto en Londres 2012.
Nasser (54 años), cabizbajo y hundido, ya se declaró culpable de diez delitos. Y pidió a la jueza, Rosemarie Aquilina, que frenara las declaraciones. En una carta, se quejó del "circo mediático". "Puede ser duro lo que usted está escuchando aquí, pero nada es tan duro como lo que soportaron sus víctimas durante miles de horas", le contestó la jueza.
Declaraciones como las de Jamie Dantzscher, dirigiéndose directamente a Nasser en la sala. "Me manipulaste para que yo pensara que eras bueno, te pedía ayuda y me agredías sexualmente una y otra vez, sólo para satisfacer tu retorcido placer", le espetó la medallista de bronce por equipos en Sydney 2000.
El juicio está teniendo, además, otras consecuencias. USA Gymnastics, la Federación, ha anunciado que la Selección no se entrenará más en el rancho de Martha y Bela Karolyi en Huntsville, en Texas. El centro de élite donde se han forjado las medallas desde hace años y donde Biles, Aly Raisman o Maroney denunciaron ser víctimas de los abusos de Nassar.