Sainz volcó en un río seco y unos motoristas le ayudaron
“Desde aquí quiero agradecerles muy mucho el gesto que han tenido”, dijo el madrileño, que fue cuarto en la etapa con final en Arequipa.
Carlos Sainz perdió tiempo, pero la renta de Peterhansel no es ni mucho menos definitiva. El madrileño de Peugeot partía segundo en la quinta etapa del Dakar y tras él marcharía Stéphane. El inicio de la jornada pudo ser mejor, según relató el propio Sainz: “Hemos encontrado arena blanda y nos hemos quedado atascados nueve minutos”. Es en una zona en la que muchos pilotos amateurs han tenido problemas este miércoles.
Después vino la parte más difícil: “Más adelante, rodando muy, muy despacio en un cauce de un río seco hemos semivolcado quedando el coche apoyado sobre mi lado, teniendo que esperar a que llegasen cuatro participantes en moto para podernos sacar. Desde aquí quiero agradecerles muy mucho el gesto que han tenido deteniéndose para ayudarnos para poner el coche en pie”.
De ahí hasta la meta no hubo incidencias de gravedad y Carlos recuperó tiempo para ser finalmente el cuarto más rápido de la jornada. Eso sí, tenía una losa: su cristal se rompió porque el coche había volcado por su lado y fue entrando arena durante el resto de la especial. “A partir de ahí hemos terminado la etapa con el parabrisas roto, con lo cual teníamos muy mala visión y no podíamos ir muy rápido”, explicó.