1x1 de España: Silva, Iniesta e Isco dan brillo a la manita
Los jugadores de City, Barça y Madrid hicieron de las suyas para desesperar a Costa Rica y divertir a La Rosaleda, entregada. Debutaron Kepa y Luis Alberto.Túnez - Costa Rica: amistoso Fecha FIFA
En otro show de España, uno más bajo el mando de Lopetegui, la mayoría de los jugadores volvieron a lucirse y siguieron consolidándose con vistas al Mundial de Rusia.
Kepa
No recordará su debut como el partido que siempre soñó, pero se llevará el recuerdo de una puesta de largo con España muy amable: sin encajar, con una única parada, ya en el 93', y practicando su juego de pies.
Odriozola
La ausencia de Carvajal le ha dado cancha y lo está gozando como el chaval que aún es. Con Costa Rica desentendida del ataque, se instaló en campo contrario, especialmente en la primera parte, con la potencia y la regularidad de un lateral llamado a cosas grandes.
Piqué
Volvió a recibir pitos, que fueron mitigando y mezclándose con aplausos según avanzaba el choque. Jugó 45 minutos en los que tuvo poco que hacer en defensa y se asomó hasta cinco veces, todas ellas sin premio, al gol.
Ramos
Sustituido al descanso como su compañero de batallas, dejó una media parte con un buen corte y un buen robo en los que se mostró atento.
Jordi Alba
Se empleó como más le gusta, subiendo sin parar y con alegría por la izquierda. Al contrario que en el Barça, donde a juzgar por sus palabras se sintió tapado por la presencia de Neymar, fue dueño y señor de la banda. Así protagonizó la primera ocasión, en el 3', apuntó mejor en el 6' para hacer el 1-0 y ayudó a armar el 2-0.
Busquets
Cuajó una media parte sobria, siendo nuevamente el rey del primer pase, la mejor vía por la que iniciar las jugadas.
Thiago
Sin dejar solo en la contención a Busquets, con el que formó pareja en el medio, asumió la responsabilidad de la circulación y tuvo instinto para llegar de cuando en cuando al área rival. En línea con la mayoría de sus compañeros, fue difuminándose en la segunda parte.
Silva
A veces lo focos le alumbran menos que a otros, pero su importancia en la Selección es indiscutible desde hace casi una década. Para muestra, su exhibición frente a Costa Rica, en la que dio una asistencia y media (en el 1-0 y en el 2-0), combinó derrochando calidad y se apuntó un doblete con el que se sitúa a tres goles de superar a Fernando Torres.
Isco
Era su noche, la oportunidad perfecta para volver a sentirse profeta en su tierra, entregada a su clase, y no lo desaprovechó. Pidió el balón en cada jugada y disfrutó con él tanto como hizo disfrutar. Bordó el fútbol, especialmente en la primera mitad, hasta que una patada fuera de lugar le obligó a pedir el cambio en el 65'. Seguro que escuchar a todo su estadio coreándole le valió de analgésico.
Iniesta
Disfrutó rodeado de tantos compañeros que hablan su mismo idioma. Marcó la pauta en cada pared y en cada triangulación, y coronó la noche haciendo el quinto chutando desde la frontal.
Morata
En medio tiempo le sobró para tener seis ocasiones de las que enchufó una. Aun lejos de ser efectivo, siguió aumentando su cuenta goleadora.
SUPLENTES
Nacho
Su papel fue testimonial, con poco que hacer tanto en defensa como en ataque.
Bartra
Rapidísimo y arriesgando el penalti, corrigió un peligroso despiste de Odriozola. Poco después regaló un córner y presumió de salida de balón al poner a Iniesta en pista para cerrar la manita.
Saúl
Quién sabe si su entrada en el campo ha podido ser el inicio de un nuevo horizonte en la Selección. Lopetegui le usó de recambio de Busquets, una solución que urge cada vez más para oxigenar con garantías al barcelonista, que ahora no puede ni constiparse. En un equipo con tanto jugón por delante, el rojiblanco tiene mucho que decir ahí.
Aspas
El bajón progresivo del encuentro le privó del ritmo necesario para plantarse delante de Carvajal salvo en uno de los últimos lances del amistoso. Con todo, dejó su entrega habitual.
Asensio
Con el partido más que zanjado, apenas encontró posibilidades para sus cabriolas.
Luis Alberto
Octavo debutante con Lopetegui, ninguno de los jugadores sobre el césped valorará tanto como él el último cuarto de hora en Málaga, la merecida recompensa a tantos años de esfuerzos y a su buen nivel actual.