Del Bosque, Maturana y Rueda, mano a mano en Barranquilla
La previa del partido de Colombia frente a Bolivia contó con un encuentro de tres grandes entrenadores en la casa de la Selección. Una charla sobre fútbol, camerinos, Galácticos y las claves tras el éxito en el deporte.
Un campeón del mundo y dos reyes de América hablaron de fútbol en Barranquilla. Tal vez la presentación se queda corta, pero es la manera más contundente de resumir no solo el listado trofeos y distinciones que brillan en su palmarés sino la carrera de tres hombres que ya dejaron huella en el fútbol. Su éxito refrenda la vocación por encaminar equipos a resultados a través de ideas que revolucionaron la manera de pensar de los jugadores que trabajaron bajo su mando. Los estilos pueden variar, pero las convicciones no se negocian.
Vicente del Bosque (Salamanca, 1950), Francisco Maturana (Quibdó, 1949) y Reinaldo Rueda (Cali, 1957) conversaron sobre fútbol en una sala llena de periodistas con un repertorio inagotable de preguntas sobre el oficio de entrenar equipos, la dificultad de trabajar con superestrellas o la evolución del deporte más popular del mundo. El técnico español que levantó la Copa del Mundo en 2010 fue el centro de atención y el blanco de todos los halagos en una charla que de a poco fue perdiendo la solemnidad para abrirle paso a los recuerdos.
En 1990, Reinaldo Rueda hizo una de sus primeras pasantías como técnico en el Real Madrid de John Benjamin Toshack y de la legendaria Quinta del Buitre, sin embargo, su atención se enfocó en los trabajos que realizaba Vicente del Bosque en la cancha del lado con el segundo equipo del Madrid y a quien 20 años más tarde enfrentaría con Honduras en Sudáfrica. “Agradezco todas las enseñanzas que nos ha dado en su exitoso proceso como entrenador, su humildad, su don de gentes, su generosidad”, afirmó el técnico de Atlético Nacional en una nueva cita en la que la vida lo vuelve a cruzar con uno de sus referentes.
“Tengo la certeza de que en el fútbol hay que aprender todos los días”. Maturana tomó la palabra para remembrar que el momento decisivo para que España consiguiera la Copa se dio tras la derrota frente a Chile. “Sepultaron, lloraron y encontraron el camino para ser campeones”, aseguró antes de revelar un vínculo aún más personal con del Bosque. “Cuando yo estuve en el Valladolid supe que él tuvo mucho que ver con que yo firmara con el Real Madrid porque dio su aval (…) Es una persona que invita a aprender de su manera de ser, de su manera de interpretar los problemas, de su manera de gestionar los vestuarios… Es un manual”, remató el colombiano.
La lista de interrogantes para Vicente del Bosque era digna de alguna de las eternas conferencias de Marcelo Bielsa, así que tras las primeras preguntas el DT español optó por agilizar la velada con respuestas cortas y contundentes. Justo su última intervención pudo revelar la esencia de su acierto para gestionar el éxito y el fracaso. “No pensaba ser entrenador profesional, me quería dedicar toda la vida a educar a los jugadores del Real Madrid para el fútbol y para la vida, así como lo hicieron conmigo”, aseguró con firmeza antes de partir. De la charla quedó esa frase y muchas otras. Reseñamos algunas de ellas:
¿Cómo cambió el fútbol español tras conquistar la Copa Mundo?
"El fútbol español lleva muchos años siendo un fútbol respetado y a nivel de clubes incluso hemos mantenido una hegemonía en Europa y no solo son el Real Madrid o el Barcelona… Están el Sevilla, el Deportivo en una época, el Villarreal en otra, el Valencia. Sin embargo, nos faltaba el toque de la Selección Española que afortunadamente llegó con una muy buena generación de jugadores, que fue capaz de ganar tres grandes torneos seguidos a partir de la calidad de los hombres que teníamos y de ese pelín de suerte que todos los equipos deben tener para ganar. Eso nos ocurrió, estábamos en ese ciclo, en esa tendencia de ganar y de eso nos aprovechamos".
¿Es más difícil ganar en un club o en una Selección?
“Todo tiene su dificultad, pero me imagino que la ventaja nuestra es que teníamos muy buenos jugadores. Al final el entrenador vale tanto como valgan sus jugadores. Nosotros tuvimos muy buenos jugadores en el Madrid, muy buenos jugadores en la Selección española y de esos nos beneficiamos. Ahora no puedo decir si es más fácil o más difícil, nosotros actuamos como siempre lo hemos hecho intentando que eso funcionara de la mejor manera posible en el terreno personal y naturalmente en lo deportivo”.
¿Qué prioriza en el manejo de un grupo?
“El entrenador de fútbol abarca muchas tareas, pero se concentra fundamentalmente en dos: una es la relación del personal de cómo funciona un vestuario y la otra, la estrategia, la parte deportiva, esas herramientas que se dan para que un equipo sea verdaderamente un equipo. Aquel que se acerque mejor a esas dos grandes labores, a hacerlas de la mejor manera posible será un hombre interesante como técnico”.
¿Cómo dominó los egos en un equipo como Los Galácticos?
“En pocas palabras: con normalidad y nada más. Teníamos gente muy buena, muy reconocida, muy valiosa, pero actuamos con la normalidad de lo que tenía que ser un grupo de trabajo porque sin eso es difícil ganar. Ellos iban a ser mejores si nosotros ganábamos, eso era seguro también”.
¿Cómo fue dirigir a un jugador tan talentoso y rodeado de distracciones como Ronaldo?
“A él le gustaba más el fútbol que el resto de cosas. Era muy bueno, buenísimo y fue un placer trabajar con él. Como cada persona necesita un trato, que fue el que intentamos darle para que rindiera de la mejor manera posible… Y él siempre estuvo muy a gusto en el Real Madrid”.
¿Qué le dejó su paso por un equipo como Besiktas?
“Yo estuve toda la vida entre las cuatro paredes del Real Madrid así que esto significó una experiencia fantástica para mí. Recomiendo a todos los que podáis ir a Turquía no solo como país para visitarlo sino por muchas otras cosas, entre esas cosas está el fútbol. Para nosotros fue un gran privilegio entrenar al Besiktas y estamos deseando que domingo tras domingo puedan ganar porque nos trataron muy bien”.
¿Cuál fue su discurso antes de disputar la final de la Copa Mundo?
“Les dije que no éramos unos soldados que tuviéramos que defender el país a través del fútbol sino que defendíamos nuestra profesión. Ese sentir nada más, esas cuatro palabras emotivas fueron las que usé para señalar a unos jugadores la importancia de jugar la final de un Mundial que a lo mejor no se sabe si la volveremos a tener”.