Aerolíneas lanzan vuelos inspirados en Travis Kelce y Taylor Swift para el Super Bowl LVIII
Tras el pase de Kansas City Chiefs al Super Bowl LVIII, American y United Airlines lanzan vuelos inspirados en la pareja del momento: Taylor Swift y Travis Kelce.
El Super Bowl LVIII ha quedado definido. El próximo domingo, 11 de febrero, Kansas City Chiefs se enfrentará ante San Francisco 49ers por el codiciado trofeo Vince Lombardi. El duelo se llevará a cabo en el Allegiant Stadium de Las Vegas, Nevada. Ante ello, diversas aerolíneas de Estados Unidos han comenzado a lanzar vuelos para el Super Tazón, inspirados en la pareja del momento: Travis Kelce y Taylor Swift.
Por su lado, American Airlines agregó vuelos de ida y vuelta de Kansas City a Las Vegas. Los números de ida corresponden a “1989″, en honor al emblemático álbum de la cantante, así como su año de nacimiento; mientras que el vuelo de regreso es el “87″, por el número de jersey de Travis Kelce. United Airlines realizó una jugada similar al enumerar nuevos vuelos como “UA 1989″, en honor al citado álbum, y “UA 2287″, como guiño al éxito de Swift de 2012, “22″, y el número de Kelce.
Otros guiños al Super Bowl
United Airlines agregó más vuelos con guiños al Super Bowl LVIII. El tercer número de vuelo agregado fue “UA 1587″, que corresponde a una combinación de los números de Mahomes y Kelce. En cuanto a los 49ers, la aerolínea lanzó los vuelos “UA 1995″ y “UA 1849″, en honor a su último campeonato ganado y el origen del nombre del equipo, respectivamente.
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La odisea de Taylor Swift para llegar al SB LVIII
Desde que los Chiefs obtuvieron su pase al Super Bowl LVIII, la atención fuera de los emparrillados se centra en Taylor Swift y su odisea para llegar al domingo del gran juego.
La superestrella de 34 años tiene programado un concierto en Tokyo, Japón, el sábado 10 de febrero, mientras que el SB se celebrará el día 11 en Las Vegas, Nevada. No obstante, gracias a los diferentes husos horarios, Taylor Swift podría llegar a tiempo. Si la cantante toma su jet privado al finalizar su show, alrededor de la medianoche, llegaría a Las Vegas durante la tarde del mismo sábado, es decir, una noche antes del Super Tazón.