Chiefs, Chargers, Broncos y Raiders: la previa de la AFC Oeste para la temporada 2023 de la NFL
Patrick Mahomes y los Kansas City Chiefs enfrentan el desafío de la resaca del Super Bowl LVII, en una división en donde los Chargers emergen como legítimos contendientes
Septiembre se acerca rápidamente y el football está por comenzar.
Las 32 organizaciones entregaron su roster de 53 jugadores el martes por la tarde y con el último trámite administrativo sorteado, podemos decir que los equipo están completos para el kickoff 2023.
Atrás quedó una sísmica temporada baja que incluyó la suspensión de múltiples jugadores por inmiscuirse en apuestas, además de una ajetreada agencia libre y las sorpresas que siempre regala el Draft.
La próxima campaña inicia justo donde terminó: con Patrick Mahomes como el principal rostro de la National Football League.
Los Chiefs saltan con el título bajo sus brazos
Para nadie es una sorpresa que Patrick Mahomes y los Kansas City Chiefs, sean los favoritos para ganar su división. De acuerdo a las proyecciones matemáticas tienen un 66 por ciento de probabilidades de repetir en el Oeste de la AFC.
Al final de cuentas así lo han hecho durante siete campañas seguidas.
Mahomes y su tight end estelar Travis Kelce hacen maravillas cuando se encuentran con el balón. Su ofensiva sigue siendo una de las más potentes de la AFC, pero necesitarán un receptor que pueda reemplazar a Travis Kelce. El año pasado JuJu Smith-Schuster quedó corto.
Márquez Valdés-Scantling deberá asumir una mayor responsabilidad para conseguir que el ataque sea consistente.
Los Chiefs dejaron salir al tackle Orlando Brown en la agencia libre y firmaron a Jawaan Taylor (Jaguars) para reemplazarlo. También incorporaron al defensive end de los Texans, Charles Omenihu.
Los Chiefs tienen uno de los calendarios más difíciles y comienzan la temporada con tres oponentes jóvenes y hambrientos: los Detroit Lions, los Jacksonville Jaguars y los Chicago Bears.
Uno de los principales retos de Kansas City será dejar atrás la resaca del pasado Super Bowl LVII.
Otra oportunidad para Russell Wilson
Las cosas no pueden ir peor para los Denver Broncos que el año pasado con el head coach Nathaniel Hacktett lucieron como uno de los equipos peores entrenados. Denver sacó de los estudios de televisión a Sean Payton para maximizar el talento de la plantilla que incluye a Russell Wilson. Si bien Wilson ha demostrado ser un animal de competencia, necesitará acoplarse al sistema de Payton para que el programa funcione.
Tiene un grupo talentoso de armas a su alrededor y una línea ofensiva sólida que hará que esta ofensiva funcione como una máquina bien engrasada. No tienen nada de qué preocuparse defensivamente.
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Garappolo se viste de negro letal
Salvo que ocurra una catástrofe (algo últimamente usual) los Raiders deberán mostrarse como un buen equipo. La ofensiva de la organización de Las Vegas ahora estará bajo la encomienda de Jimmy Garoppolo con el corredor Josh Jacobs y el wide receiver Davante Adamas como armas de grueso calibre.
Los Raiders afrontarán uno de los calendarios más complicados y Garoppolo deberá ser más que un administrador de juego. El quarterback tiene la responsabilidad de ganar varios encuentros para competir por un puesto de postemporada o resignarse a vivir en el hoyo negro.
El mejor trabajo de los Raiders podría haber llegado en el Draft de la NFL. Obtuvieron al ala defensiva de Texas Tech, Tyree Wilson, con la séptima selección general.
La temporada pasada los Raiders terminaron con seis victorias y deberán subir mucho más alto ese listón de acuerdo al equipo que tienen.
El entrenador Josh McDanields deberá ser innovador, si no quiere que Mark Davis lo eche antes de la Semana 18.
Legítimos contendientes
Las expectativas de los Chargers están elevadas. Justin Herbert, su quarterback franquicia tiene que dar ese salto de calidad y ahora con Kellen Moore como ofensiva, creo que puede llevar a Herbert y esta ofensiva a otro nivel.
Herbert está rodeado de talento incuestionable: Keenan Allen, Mike Williams, Quentin Johnston y Joshua Palmer son el departamento de receptores más profundo en la NFL.
Los Chargers no se volvieron locos en la agencia libre, pero hicieron una incorporación importante al contratar al linebacker Erin Kendricks para reforzar su front 7 y mejorar la defensa contra la carrera.