Los Astros defenderán su corona del Oeste de la Liga Americana ante las amenazas de los Angels y Mariners

Cuando el martes  pasado Shohei Ohtani y Mike Trout se alinearon frente a frente para el último out de la quinta edición del Clásico Mundial, muchos aficionados de Los Angeles Angels se preguntaron si estos dos superdotados del beisbol no podrían disputar juegos definitorios para su organización.

Los performance que lograron Ohtani y Trout en el certamen internacional, aumentaron el hambre de postemporada para la base de seguidores de este equipo que no ingresa a playoffs desde 2014 y que por algunos meses se mantuvo en venta por parte de su propietario Art Moreno.

Con dos estrellas en el orden de su alineación, los Angels están decididos en competir en la que podría ser la última  campaña del Ohtani con el uniforme de los californianos. El pelotero de dos vías concluirá su contrato al finalizar la Serie Mundial y aún no ha dado pistas de querer renovar. El japonés apostará por sí mismo este año buscando una gran campaña que lo lleve a un cheque que asegure su porvenir y el de sus siguientes tres generaciones, algo que en 2022 logró Aaron Judge con los New York Yankees.

Para darle más herramientas de trabajo al manager Phil Nevin, Los Angeles atrajo el talento de  Tyler Anderson y solidificaron la alineación en torno a Ohtani y Mike Trout con algo de fuerza: Hunter Renfroe y Brandon Drury.

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El mayor inconveniente para los Angels se sitúan a varias cientos de millas de distancia: Houston Astros.

Los actuales campeones del beisbol de Grandes Ligas sostienen argumentos para repetir en el Oeste de la Americana y durante el trayecto a la World Series.

Los Astros perdieron a Justin Verlander (1.75 de efectividad) en la agencia libre y a Lance McCullers Jr. por una distensión muscular en el codo derecho. Aún así, tienen a Hunter Brown, José Urquidy, Luis García, Cristian Javier y el gran Framber Valdez formando una sólida rotación. El bullpen de élite lleva a este cuerpo de lanzadores a un escalón más arriba.

José Altuve se perderá el inicio de temporada luego de sufrir una fractura en el pulgar que requirió cirugía en el Clásico Mundial. Aún así, Alex Bregman, Kyle Tucker, José Abreu, Jeremy Peña, Chas McCormick y el regreso de Michael Brantley forman una alineación imponente, sin contar al cubano Yordan Álvarez quien tiene problemas en su mano, pero cuando logre sanar se convertirá en un enorme pistón para este motor de nueve potentes cilindros.

Otro pequeño gran obstáculo que tendrán los Angels se sitúa al norte: los Seattle Mariners.

Después de regresar a la postemporada por primera ocasión en 20 años, Seattle no querrá perderse de nuevo la fiesta.. Agregaron  fuerza a la alineación con Teoscar Hernández y AJ Pollock, además de una gran defensa dentro del cuadro en Kolten Wong. Los Mariners tienen el bullpen mejor clasificado, liderado por el lanzallamas derecho Andrés Muñoz, Paul Sewald, Diego Castillo, Matt Brash, Penn Murfee y muchos más. Su rotación es joven y talentosa, y su clasificación cuenta la historia de un contendiente a los playoffs.

En una recostrucción que esperan dure menos tiempo de lo que ya demoró, los Texas Rangers hicieron incorporaciones que llevarán personas al parque de pelota.

Jacob deGrom, Nathan Eovaldi, Andrew Heaney y Will Smith, son algunos de ellos.

Corey Seager (33 jonrones, el máximo de su carrera) y Marcus Semien serán las estrellas de la alineación, pero necesitan que  Josh Jung, Ezequiel Durán y otros bateadores jóvenes den el salto para ser un equipo amenazante.

Con los Oakland Athletics no hay mucho que esperar más alla de saber si finalmente los mudarán en el futuro cercano a Las Vegas.

Su principal objetivo deportivo será desarrollar talento joven como el de  Shea Langeliers, Ken Waldichuk, Luis Medina, Cristian Pache, Tyler Soderstrom, JJ Bleday.

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