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NBA | KINGS 132 - LAKERS 127

LeBron, como el buen vino

Misma fecha, misma ciudad. El alero volvió a Sacramento exactamente 20 años después de su debut. ‘El Rey’ ha sobrevivido a toda su generación manteniendo números de MVP.

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LeBron James, alero de Los Angeles Lakers, salta durante la presentación previa al partido contra Sacramento Kings.
Cary EdmondsonUSA TODAY Sports via Reuters Con

Un 29 de octubre de 2023 llegó a la NBA un joven de Ohio al que el mundo había bautizado como Choosen 1 (El Elegido). Sus atributos físicos eran excepcionales pero estaban por pulir, su IQ baloncestístico empezaba a dejar aflorar detalles que atisbaban que estábamos ante un animal diferente, pero sobre todo ese chico tenía algo que desde el primer día estuvo afilado y lo diferenció del resto: una mentalidad ganadora que solo poseen los mejores.

Sacramento fue el lugar que vio nacer a un tal LeBron Raymond James como jugador de baloncesto profesional y el destino, como elemento caprichoso que es, ha querido que el ‘Rey’ volviera exactamente 20 años después como el único representante de una generación de baloncestistas excepcional, pero que estuvo a la sombra de una figura excepcional e irrepetible.

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Cary EdmondsonUSA TODAY Sports via Reuters Con

LeBron ha cerrado el círculo. Cuatro anillos, Cuatro MVPs y 19 All Stars después, el alero nacido en Akron sigue siendo uno de los mejores jugadores de la Liga a sus 38 años. Su nivel físico, siendo el segundo jugador más veterano, sigue siendo mejor que el de la mayoría de jugadores y su hambre y voracidad continúan intactos.

La evolución de un ‘Rey’

Si hacemos una comparativa del debut de LeBron con las estadísticas del partido que disputó 20 años después, vemos una mejora en varios apartados en los que el alero es un jugador mejorado, mientras ha mantenido el ritmo numérico en otros. Sigue siendo regular en su promedio anotador, siempre cercano a los 30 puntos. Además, es un reboteador más sólido y un tirador de larga distancia más consistente.

El jugador franquicia, ahora de los Lakers, ha mutado en un director de orquesta más fiable, que impone mucho menos su poder físico y lo reserva para momentos clave. Gasta menos gasolina y hace mejores a sus compañeros. Por todo esto, ya no es solo admirable la longevidad de la carrera de LeBron, sino que lo realmente impactante es que haya llegado a este punto sin haber sufrido una bajada de forma como le ocurren al resto de mortales con el paso de los años. Larga vida al Rey.

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