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El Gran Premio de Las Vegas supera las expectativas de la F1

A pesar del desastre inicial, el GP de Las Vegas ha terminado por catalogarse como un éxito sin precedentes en la F1. Se estima haber cosechado un rédito económico de 1.200 millones de dólares.

Formula One F1 - Las Vegas Grand Prix - Las Vegas Strip Circuit, Las Vegas, Nevada, U.S - November 18, 2023 Aston Martin's Fernando Alonso in action in front of the sphere during qualifying REUTERS/Mike Blake
MIKE BLAKEREUTERS

La F1 ha encontrado un nuevo filón en su calendario. Luego de las expectativas generadas en torno al Gran Premio de Las Vegas, la ‘Ciudad del pecado’ puede vanagloriarse de haber organizado una de las mejores carreras de los últimos tiempos. Conocida por ser el hogar mundial de la vida nocturna, ahora también podrá serlo de la F1. La primera edición del Gran Premio de Las Vegas dejará tras de sí varias instantáneas y momentos históricos, pero pasará a la historia por haberse convertido en uno de los eventos más rentables de la historia reciente de la ciudad de Nevada.

El impacto económico de la F1 es de sobra conocido para el público y organizadores. En los últimos años, el ‘Gran Circo’ ha tomado una nueva dimensión dentro del deporte, mezclando motor y adrenalina con la participación de estrellas mediáticas de la música o el entretenimiento. El Gran Premio contó con una asistencia de más de 300.000 personas a lo largo del fin de semana, teniendo además un impacto económico valorado en casi 1.200 millones de dólares, según apuntaron varios organizadores a diferentes cadenas americanas. El mes de noviembre de 2023 ya se vislumbra como el mejor mes a nivel financiero de la historia de la ciudad.

La ‘Ciudad del pecado’ albergó uno de los mejores y más rocambolescos eventos de los últimos años, llegando a verse a artistas y deportistas de la talla Brad Pitt, Rihanna, Terry Crews, Lupita Nyong’o, Cara Delevingne, Usain Bolt, Zlatan Ibrahimovic, Caroline Wozniacki, David Beckham, Shaqulle O’Oneal o Sergio Busquets pasear por el paddock del Strip de Las Vegas. La apuesta por llevar la F1 al desierto de Nevada ha terminado por convertirse en todo un filón para la industria hotelera de la ciudad, colgando el cartel de “sin habitaciones” en varios de ellos. “El Gran Premio de Las Vegas ha establecido un nuevo estándar para la F1 y estamos contentos de haber sido parte del inmenso éxito del evento”, comentaría durante el evento Tom Reeg, director ejecutivo de Caesars Entertainment, empresa que gestiona hoteles, casinos y campos de golf en la ciudad.

Si bien a priori se esperaba que el evento atrajera una masa social bastante baja debido al precio de las entradas, de lejos las más caras de este año, el evento superó las expectativas puestas por las autoridades locales. Las entradas más baratas partían desde los 500 dólares, las de admisión general sin derecho a asiento, hasta las más caras, pasando a valer casi 2.000 dólares. Sin embargo, competición ya ha puesto a la venta las primeras entradas para el evento del año que viene, que se disputará del 21 al 23 de noviembre.

Demanda a la F1

Si bien el evento vio un culmen brillante el pasado domingo, el Gran Premio no pudo empezar de peor manera. El arranque de la jornada del jueves llevó a la dirección a tomar decisiones altamente cuestionadas, como la inverosímil sanción a Carlos Sainz tras su accidente a raíz del mal estado de la pista. La FIA suspendió la jornada, haciendo que los miles de aficionados desplazados hasta la ciudad perdieran su oportunidad de poder disfrutar del deporte, además del increíble rédito económico que supondría a sus bolsillos.

Según se fue informando desde el fin de semana, los aficionados afectados pondrán una demanda a la organización por la decisión, pidiendo un reembolso de su entrada luego de descubrir que la FIA devolvería el importe de las entradas con vales valorados en 200 dólares para comprar productos oficiales de la competición.

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