NFL | BURROW

Los Bengals no tomarán decisión con Joe Burrow antes del Monday Night

El quarterback de Bengals está en la lista de cuestionables para esta tercera jornada tras su reiterada lesión en la pantorrilla derecha.

DYLAN BUELLAFP

Cincinnati Bengals vuelve a la carga en esta ‘Week 3′ donde reciben en el Paycor Stadium a unos Rams que llegan tras ganar su partido inaugural ante Seahawks, para después perder un partido relativamente ajustado ante los 49ers en su propio estadio. Apenas día y medio antes del choque, todos los focos de este partido están puestos en un hombre: Joe Burrow.

El quarterback de 26 años es duda hasta última hora para el choque ante Rams tras acabar muy resentido de su pantorrilla derecha en el último partido en la derrota ante Ravens. Burrow lleva acarreando problemas en esa zona de su pierna desde la temporada pasada y aunque las molestias le permiten jugar durante la mayoría del tiempo, esto supone un riesgo cada vez que la estrella de Bengals entra al campo.

Ahora, pese a que Bengals ha declarado cuestionable a Burrow para un partido tan crucial como es el de Rams, la franquicia deberá sopesar muy bien la estrategia para evitar un mal mayor en esa pierna derecha de Burrow. La franquicia de Cincinnati debe gran parte de su éxito reciente a su joven estrella, y deberá conservarlo si quiere aspirar a todo una vez llegue el tramo decisivo de este curso.

Preocupación general en Bengals

En una liga como la NFL es habitual que un porcentaje de jugadores juegue con molestias o problemas físicos casi en cada partido de la temporada, pero la situación de Burrow es algo diferente y compleja, tanto por el tipo de lesión como por su peso dentro del equipo. Tal es así que su compañero Ja’Marr Chase reveló que le había pedido que descansase ante Rams.

Burrow tiene tras de sí una larga lista de dolencias, la más grave de ellas, aquella lesión en la rodilla de 2020 cuando apenas sumaba 3 partidos con Bengals en su temporada de novato. Aquella lesión hizo temer por la carrera del quarterback, que nada más lejos de verse truncada, le llevó 15 meses después a jugar su primera Super Bowl como director de campo y estrella absoluta.

Este antecedente puede ser clave a la hora de entender que Burrow tiene una capacidad de autocontrol y de recuperación notable, aunque ninguna molestia se ha prolongado tanto en el tiempo como la de la pantorrilla derecha, lo que pone en la difícil situación de decidir como afrontarla tanto al jugador como a la franquicia, en un punto donde la temporada empieza a ir cuesta abajo y sin frenos.