INGLATERRA
El Liverpool tiembla por Salah
La salida de Klopp a final de temporada pone en entredicho la continuidad de algunos pesos pesados de Anfield. El egipcio acaba contrato en 2025.
El ‘huracán Klopp’ sigue azotando Liverpool a días de haber anunciado su decisión de abandonar el club a final de temporada. A la salida del técnico alemán, que supone el punto y final a una de las etapas doradas del club inglés, podría seguirle la marcha de algunos pesos pesados de la plantilla actual. Como comentó Virgil Van Dijk, “el club tiene un gran trabajo entre manos” para armar un proyecto que pueda convencer a los más veteranos. Entre ellos, Salah es uno de los que a día de hoy se podrían considerar una ‘patata caliente’.
El egipcio, que regresó hace pocos a días a Liverpool tras lesionarse con su selección en la Copa África, será uno de los nombres propios del próximo verano en Anfield. A sus 31 años, Salah sigue siendo considerado como uno de los mejores jugadores del planeta y uno de los que mejor cartel tiene de la plantilla actual. Con contrato hasta 2025, su renovación se plantea como capital de cara a estos meses tras la marcha de Klopp, uno de sus principales valedores a la hora de ficharle en 2017.
La comunión entre Salah y el Liverpool es total, siendo uno de los ídolos del equipo y uno de los referentes de la ciudad en los últimos años. Sin embargo, eso no ha evitado que en el pasado oyera cantos de sirena para intentar un cambio de aires. Sin ir más lejos, el ex de la Roma contó con varias ‘novias’ en el pasado verano, con los ‘pretodólares’ saudís llamando a su puerta para cubrirle en oro.
Van Dijk y Alexander-Arnold, las otras ‘patatas calientes’
La revolución en Liverpool a partir del próximo verano está clara. Junto a Salah, otros pesos pesados como Van Dijk o Trent Alexander-Arnold también finalizan contrato en junio de 2025. Si bien la ambición del grupo se mantiene a la orden del día, ahora incluso peleando otra vez por la Premier, los planes de futuro del club inclinarán la balanza a uno y otro lado dependiendo de quién termine por coger las riendas del equipo.