En Estados Unidos, al igual que en muchos otros países, la gasolina es el combustible principal para la mayoría de los autos. Sin embargo, a diferencia de algunos lugares, en las gasolineras estadounidenses existen varias opciones con diferentes nombres y precios.
Con esta variedad, para muchos conductores, elegir la gasolina adecuada puede ser un dilema, especialmente si no están familiarizados con las opciones disponibles.
En sí, la clave para entender la diferencia entre las gasolinas radica en el octanaje. Este número, que suele estar visible en los surtidores, indica la capacidad del combustible para resistir el “knocking” o detonación prematura del motor. En términos simples, a mayor octanaje, mayor resistencia a la detonación.
Para comprender más este término hay que imaginar la gasolina como un atleta. A grandes rasgos, el octanaje es su “resistencia”: la capacidad que tiene para soportar la presión y la temperatura sin “estallar” antes de tiempo. Esto se traduce en un funcionamiento más suave y eficiente del motor.
Los tipos de gasolina que hay en Estados Unidos
Tras entender qué es el octanaje, es más fácil comprender los tres tipos de gasolina en USA:
Regular (87 octanos): La opción más económica, ideal para la mayoría de los vehículos modernos con motores de baja a media compresión. Es recomendada por la mayoría de los fabricantes de automóviles y ofrece un buen balance entre rendimiento y precio.
Media (89-90 octanos): Una alternativa intermedia en precio y rendimiento. Suele ser la opción preferida para autos de alto rendimiento, deportivos o aquellos que operan en climas montañosos o con cargas pesadas.
Premium (91-94 octanos): Se trata de la gasolina más cara, pero también la que ofrece mayor resistencia a la detonación. Está diseñada para motores de alta compresión, como los de autos deportivos o de lujo.
Tipos de gasolina en USA: ¿Cuál elegir?
Sin duda, la mejor manera de saber qué tipo de gasolina usar en tu vehículo es consultar el manual del propietario. En él se encuentran las especificaciones del fabricante sobre el octanaje recomendado para el motor.
En general, usar gasolina de un octanaje más alto de lo recomendado no dará ningún beneficio adicional, e incluso podría ser perjudicial para el motor. De hecho, puede reducir el rendimiento del combustible y aumentar las emisiones.
Por otro lado, usar gasolina de un octanaje inferior al recomendado puede provocar detonación, lo que puede dañar el motor.
Mitos y realidades
De los muchos mitos que existen alrededor de los tipos de gasolina, estos son los más comúnes:
Mito: La gasolina premium limpia mejor el motor. Realidad: No hay evidencia que respalde esta afirmación. Todos los tipos de gasolina limpian el motor de manera similar.
Mito: La gasolina premium aumenta el rendimiento del combustible. Realidad: En la mayoría de los casos, la diferencia en rendimiento entre la gasolina regular y premium es mínima.
Mito: Solo los autos deportivos necesitan gasolina premium. Realidad: Si el vehículo tiene un motor de baja compresión, usar gasolina premium no dará ningún beneficio y podría incluso ser un gasto innecesario.