La juvenil del Angel City FC irrumpió con fuerza en la NSWL. Ahora, es una de las grandes esperanzas del cambio generacional en la Selección de Estados Unidos.
La generación dorada del fútbol estadounidense se ha apagado. Sin embargo, Alyssa Thompson abandera a la nueva camada. La joya angelina destacó desde pequeña, brilló en variedad de academias, despuntó como la única mujer en equipos varoniles, irrumpió con poderío en la NSWL, es el rostro del mediático Angel City FC y ya disputó un Mundial. Con sólo 19 años, el futuro es brillante y promisorio.