El día en que El Mágico González jugó mal para no fichar con Atalanta
Durante su mejor momento con el Cádiz, varios equipos se pelearon por el crack salvadoreño, que se negó a dejar al club de sus amores e hizo de todo para seguir en el cuadro español.
Jorge Alberto 'El Mágico' González es considerado el mejor futbolista que Centroamérica ha dado en la historia y durante el mejor momento de su carrera, el astro cuscatleco fue buscado por grandes equipos europeos, pero 'El Mágico' hizo de todo para seguir con el Cádiz, club de sus amores y por el que rechazó jugosas ofertas, entre ellas las de clubes como PSG y Atalanta, esta última por una razón increíble.
En 1991, el club italiano buscaba a toda costa el fichaje del centroamericano, sin embargo 'El Mágico', se negó a toda costa a salir del cuadro español, al grado de jugar mal a propósito cuando los visores del cuadro de Bérgamo fueron a observarlo a un partido de la Liga Española.
"Es cierto, jugué mal a propósito el día en que me vinieron a ver los de Atalanta. No quería irme, estaba muy bien en Cádiz", recordó en alguna ocasión González, que hizo historia con el conjunto español, donde pasó el mayor tiempo de su carrera y dejó un legado imborrable.
Esa no fue la única ocasión en la que el salvadoreño le negó su talento a un club europeo, pues luego del Mundial de España 82, el Paris Saint-Germain, ofreció a FAS una suma de 80,000 pesetas e incluso hubo un acuerdo de palabra con el club salvadoreño, pero no con el jugador, quien descartó su llegada al fútbol francés, argumentando que en París no podría llevar el estilo de vida al que estaba acostumbrado.
La divertida historia en torno a su fichaje frustrado con Atalanta
Atalanta puso sobre la mesa una jugosa oferta para que 'El Mágico' llegara a la Serie A, pero sus supuestas malas actuaciones frente a los visores del cuadro italiano no fueron los únicos obstáculos que el cuscatleco puso para impedir su fichaje, ya que según se cuenta, el salvadoreño puso otra traba para no llegar al conjunto de Bérgamo, al que rechazó luego de indagar que no servían pescado frito en dicha ciudad, lo que lo alejaría de uno de sus platillos favoritos y finalmente, se mantuvo en el Cádiz antes de regresar a El Salvador.