Coronavirus

Instalan Reloj de la Muerte de Trump para evidenciar su gestión contra el Coronavirus

El 'Reloj de la Muerte de Trump' fue puesto en Nueva York para evidenciar la gestión del presidente de Estados Unidos contra el Coronavirus.

Estados UnidosActualizado a
El 'Reloj de la Muerte de Trump' fue puesto en Nueva York para evidenciar la gestión del presidente de Estados Unidos contra el Coronavirus.

Muchas personas en Estados Unidos están inconformes por la gestión de Donald Trump ante la pandemia de Coronavirus; según declaraciones del epidemiólogo de la Casa Blanca, Anthony Fauci, el gobierno norteamericano tuvo una reacción tardía ante el patógeno, pues si se hubieran implementado medias tiempo antes, se habrían podido salvar "miles de vida".

'El reloj de la muerte de Trump' es un claro ejemplo de la inconformidad manifestada por su forma de luchar contra el COVID-19, pues en él se le atribuyen al presidente al menos el 60% de los lamentables fallecimientos por la pandemia y no al propio patógeno.

Este fue instalado en Times Square en la ciudad de Nueva York y mantiene el recuento de las muertes a causa de la 'inacción del gobierno', la iniciativa fue propuesta y ejecutada por Eugene Jarecki, galardonado cineasta, documentalista, autor y activista, dos veces ganador a los premios Sundance Grand Jury Prize, Emmy y Peabody.

"Lo que descubrimos fue que había una verdad asombrosa y muy oscura subyacente a los números que hablan del mal manejo imprudente de una pandemia por parte del presidente y su equipo, y sentimos que debería cuantificarse", dijo Jarecki.

Según el sitio creado por Eugene Jarecki, 44 mil 051 muertes de las más de 80 mil que se tienen registradas debido a la pandemia son responsabilidad del mandatario estadounidense y su mal manejo.

En qué se basa el cálculo

Según la información, el número de fallecimientos que se le adjudican a Trump se basan en estudios de los especialistas del Imperial College de Londres, en donde se mantiene la teoría de que si hubiera reaccionado debidamente una semana antes del 16 de marzo, entonces se habrían evitado el 60% de las muertes.