Los 40 USA
RegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

MLB

Muere Don Larsen, el único con juego perfecto en Serie Mundial

Larsen es el único serpentinero en la historia de Grandes Ligas en lanzar un juego perfecto en el Clásico de Otoño; lo hizo ante Brooklyn Dodgers en 1956.

Estados UnidosActualizado a
Larsen es el único serpentinero en la historia de Grandes Ligas en lanzar un juego perfecto en el Clásico de Otoño; lo hizo ante Brooklyn Dodgers en 1956.
Bebeto MatthewsAP

Don Larsen, un serpentinero promedio cuyo paso por la MLB no resaltó al nivel otros contemporáneos, con la excepción de lanzar una de las joyas más trascendentes del baseball, el juego perfecto de la Serie Mundial de 1956 entre Dodgers y Yankees, murió la noche del miércoles, a sus 90 años, en Hayden Lake, Idaho.

El fallecimiento de Larsen, a causa de un cáncer de esófago diagnosticado desde el pasado verano, fue confirmada por su agente, Andrew Levy.

Juego perfecto

Durante los años 50, ninguna rivalidad en el deporte estadounidense generó las mismas emociones que lograron entre New York Yankees y Brooklyn Dodgers, quienes disputaron, entre sí, un total de cuatro Clásicos de Otoño en dicha década.

En uno de ellos, el de 1956, Don Larsen salió al terreno de juego para hacerse cargo del montículo. El resultado de la labor del serpentinero, que culminó como el más valioso de aquella Serie Mundial, fue una pieza única en la historia. Larsen se las ingenió para retirar 27 outs de manera consecutiva el 8 de octubre, en el Juego 5, para desempatar la serie en favor de los Bombarderos 3-2.

Frente a los 64,519 aficionados que atravesaron las puertas del original Yankee Stadium, Larsen ponchó a siete Dodgers y neutralizó a los diez bateadores enfrentados con el dominio de sus lanzamientos.

La pizarra marcaba desde las praderas que los Yankees se ponían a un out de asegurar la mínima ventaja en la Serie Mundial, al ir empatados a dos juegos. Después de retirar al receptor Roy Campanella con un rodado al segunda base Billy Martin, el manager de Brooklyn Walter Alston mandó a la caja de bateo a su emergente Dale Mitchell. Éste ingresó por el pícher Sal Maglie. Y tras defenderse con cuenta de 1-2, bateando en dos ocasiones a territorio de foul, Mitchell hizo swing al quinto envío de Larsen pero el bate no hizo contacto con la esférica blanca, que al arribar al guante de Yogi Berra, sonó el golpe seco que convirtió el desempeño de Larsen en un clásico instantáneo.

Brooklyn se llevó el Juego 6 en el Ebbets Field. Clem Labine lanzó 10 entradas completas para los Dodgers en el duelo donde Jackie Robinson dejó en el terreno a Yankees con una línea al jardín izquierdo, que trajo a Jim Gilliam al plato.

Con un par de cuadrangulares de Berra y cuatro carreras producidas, el último de la serie fue para Yankees, con lo que ganaron el título 17 en su historia.

La travesía de Larsen

El lanzador diestro duró un total de 14 campañas en la MLB, donde jugó para siete novenas distintas. Debutó con St. Louis Browns en 1953 y el siguiente año lo pasó con Baltimore Orioles. De 1956 a 1959 defendió el uniforme blanco a rayas de New York Yankees. Después, pasaría a portar los colores de Kansas City Athletics, Chicago White Sox, San Francisco Giants, Houston Colts .45s y Chicago Cubs.

El dueño del único juego perfecto en la historia de la postemporada de la Gran Carpa obtuvo 81 victorias en su carrera y 91 derrotas, manejando una efectividad de 3.78 en 1,548 episodios de labor en la loma. Larsen finalizó su carrera como ligamayorista con un total de 849 ponches.