Rally histórico en Washington: Nationals por encima de Brewers
Juan Soto le salvó la temporada a Washington y Strasburg a Scherzer, en su primera actuación como relevista. Joe Hader terminó con la derrota.
Empezó octubre y, con él, llegó la mejor versión del baseball de Grandes Ligas. El Nationals Park pintado de blanco y rojo en las gradas estrenó la postemporada con un partido lleno de emociones y que para beneficio de sus fanáticos y apostadores el final trajo la algarabía de vuelta a la capital estadounidense con el triunfo 4-3 sobre Milwaukee Brewers.
La encomienda de Dave Martínez de defender la localía se le delegó al tres veces Cy-Young Max Scherzer, quien abría su primer partido de Wild Card, pero su décimo cuarto de postemporada en su carrera.
Con Christian Yelich, candidato al MVP de la Liga Nacional, en la banca, sanando de la lesión de su rodilla, parecía cosa fácil para Scherzer, pero antes de sacar el primer out de la noche, el daño ya estaba hecho.
Scherzer inició con su recta descontrolada, atacando la parte externa de la zona de strike de Tren Grisham, primero en el orden de bateo de Milwaukee, quien negoció el boleto a la primera goma. Después vino Yasmani Grandal y descontó el marcador con un cuadrangular a la primera recta que recibió; 2-0 para Brewers al cierre de la primera.
Al comienzo de la segunda alta, Eric Thames recibió a Scherzer con un bambinazo solitario que viajó por los límites que conjuntan al jardín central y el derecho. La pizarra ya favorecía a los visitantes con una ventaja que por momentos daba visos de funcionalidad en una sola novena.
Del otro lado del diamante Brandon Woodruff colgó el cero durante tres entradas. En la cuarta baja lo sorprendió Trea Turner con una recta que se quedó alta y cómoda para el shortstop. La madera sonó y la pelota terminó en las gradas de una afición que empezaba a ondear sus toallas y hacer ruido.
A la octava baja Milwaukee llegó con ventaja de dos carreras sobre los locales y Craig Counsell trajo a quien se le ha catalogado como uno de los mejores cerradores de las últimas dos temporadas. La melena de Joe Hader se dibujó al fondo del campo, saliendo del bullpen, para cerrar el partido e ir por la revancha a Los Angeles.
Con un hombre fuera y cinco outs para avanzar a la Serie Divisional, ante todo pronóstico, llegó el punto de declive de Milwauke. Joe Hader frente a Michael Taylor, cuenta máxima. Salió del montículo la recta de 98 millas que cambió por completo el momentum del encuentro e impactó la muñeca izquierda del bateador. Su primer Hit by picth en su carrera de postemporada.
A pesar de ponchar a Trea Turner un turno después, el veterano Ryan Zimmerman, como emergente, conectó un hit al central que le devolvió la esperanza a Washington. Anthony Rendón hizo lo mismo con una base por bola.
Un out más y Hader terminaba de tajo con el suspenso. Juan Soto, del otro lado, con la oportunidad más grande en su joven carrera. Al final, la madera venció la pelota y ésta se clavó en el jardín derecho de Trent Grisham, quien con un error dejó escapar el Wild Card y la temporada completa.
La responsabilidad llegó al final para Daniel Hudson. El segundo partido en octubre de su carrera y salió ileso con el salvamento. Hudson y el dominicano le dieron la primera victoria a Washington en la hsitoria de la franquicia cuando enfrentan eliminación, desde que Montreal Expos lograron la hazaña el 11 de octubre de 1981 ante Philadelphia Phillies en la Serie Divisional.
El pitcheo
El siete veces All-Star Max Scherzer terminó su labor luego de 5 IP, 3 ER, 6 ponches, 1.4 WHIP; mientras que para Brandon Woodruff las cosas resultaron mejor: dejó el partido ganado al bullpen tras 4.0 IP, ER, 3 ponches y .5 WHIP.
La labor de los relevistas de ambos equipos logró mantener a las ofensivas en ceros por el resto del juego. Dave Martínez empleó la escuela Bochy y trajo a su mejor lanzador del dogout, al abridor Stephen Strasburg, quien terminó con la victoria luego de tres entradas completas, donde solo permitió un par de hits y otorgó cuatro ponches.
Para Milwaukee, Brent Suter y Drew Pomeranz se combinaron para tres entradas limpias y un par de ponches.