Reporte: Seahawks buscaron reemplazar a Russell Wilson en múltiples ocasiones

Russell Wilson está a punto de iniciar una nueva etapa en su carrera cuando comience la temporada 2022 pues jugará con los Denver Broncos, luego de ser traspasado por los Seattle Seahawks durante la offseason.

El quarterback debe estar feliz, ya que su antiguo equipo lo quería lejos desde hace mucho tiempo. Acorde al reporte de Brady Henderson, de ESPN, los Seahawks buscaron deshacerse de Russell Wilson en múltiples ocasiones desde 2017.

John Schneider, general manager de Seattle, fue uno de los visitantes del pro day de Texas Tech en 2017 donde todos los equipos estaban enamorados de Patrick Mahomes. El gerente estaba tan encaprichado con el ahora QB de los Chiefs que lo hubiera reclutado de estar disponible en la parte final de la primera ronda del Draft.

Un año después, Schneider buscó reclutar a Josh Allen, QB estrella de los Bills. Henderson añade que en 2018 los Seahawks ofrecieron a Wilson a los Cleveland Browns a cambio de la primera selección global. El equipo de la AFC Norte rechazó la propuesta y eligió a Baker Mayfield, mientras que Allen fue elegido hasta la posición número siete.

Esos rumores provocaron que Wilson buscara una cláusula de no traspaso en su próxima extensión contractual, la cual firmó en abril de 2019. En ese momento, el QB se convirtió en el jugador mejor pagado de la historia de la NFL con un acuerdo de 4 años y 140 millones de dólares.

TE PUEDE INTERESAR: Los Bills inician con triunfo un viaje mágico

Sin MVP

Otro de los motivos por los que la separación entre Wilson y Seahawks era inevitable fue el sistema de juego ofensivo del equipo. Seattle ha sido uno de los equipos que enfocan su ataque en el juego terrestre y pocos pases a través de play action.

Tras la extensión, Wilson fue uno de los primeros candidatos para el MVP de la campaña 2019 puesto que en los primeros nueve partidos de la temporada registró 2,505 yardas con 22 touchdowns y una intercepción. Sin embargo, el plan de juego establecido por Brian Schottenheimer, el coordinador ofensivo de ese entonces, mermó sus estadísticas y Lamar Jackson, de los Baltimore Ravens fue el ganador del trofeo.

Al año siguiente, ‘DangeRuss’ registró 14 pases de touchdown en los primeros tres partidos de la campaña, pero sistema de Schottenheimer a favor de la carrera, complicó sus aspiraciones al MVP pese a finalizar el año con 4,212 yardas y 40 TDs, la mayor cantidad de su carrera.