Los Warriors, a la espera de Draymond Green

Tras una pretemporada de dulce, donde los Golden State Warriors se han impuesto en tres de sus cuatro partidos, una nueva temporada de la NBA espera en San Francisco. Tras lograr la millonaria incorporación de Chris Paul, que se endosará más de 30 millones este curso, Steve Kerr solo echará de menos a uno de sus pilares de los pasados años, Draymond Green. El integrante del ahora Big Four de los Warriors es seria duda para el debut ante los Suns.

La lesión de Draymond Green se ha ido convirtiendo en una cuestión de estado en la bahía de San Francisco. El ala-pívot sufrió un esguince en su tobillo izquierdo durante la realización de un partido improvisado en el Chase Center a finales del mes pasado. Ahora, en un comunicado de la franquicia sanfranciscana, se duda que el jugador vaya a estar disponible para antes del estreno ante los temibles Phoenix Suns.

“Draymond Green, que sufrió una lesión en su tobillo izquierdo durante los entrenamientos de pretemporada y se perdió los cinco partidos de pretemporada del equipo, continúa progresando adecuadamente. Ha sido claro para empezar los entrenamientos del equipo (5 vs 5) y su retorno a los partidos estará basado en su progreso como él también trabaja en su vuelta en óptimas condiciones de juego”, rezaba el mensaje del departamento de relaciones públicas de la franquicia.

Un debut de altura

Para la primera fecha del torneo, los Warriors arrancarán con una final anticipada. El Big Four del Chase Center, para esa noche Big Three, tendrá ante sí el gran reto de parar a los Kevin Durant, Devin Booker y Bradley Beal. Además, Chris Paul volverá al desierto de Arizona en una noche muy especial, enfrentarse al que a priori deberá ser su reemplazo. Los de Steve Kerr correrán con la ventaja de jugar en un fortín como el Chase Center; los Warriors ganaron el 80.5% de sus partidos en casa, apenas cayendo en ocho ocasiones.

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