La historia tras el Shara Bullet vs Trócoli: dopaje, viaje express y corte de peso en un avión

Shara Bullet es una figura fundamental para la UFC en el apartado de Oriente Medio por su vínculo a través de la religión. Cómo el resto de daguestaníes, el ilusionante peso medio que llegó a la compañía tras 11 victorias y 11 finalizaciones, es musulmán, algo que lo convierte en una figura muy mediática que no podía faltar en la primera aparición de la promotora en Arabia Saudí, en un paso fundamental para su expansión extranjera.

En una primera instancia, hace ya varios meses, ‘Bullet’ estaba emparejado con Ihor Potieria, un combate que para muchos no cobraba sentido al enfrentar a un ucraniano y un ruso, dadas las situaciones actuales geopolíticas. Sin embargo, Potieria cayó lesionado en su pelea ante Michel Pereira en UFC 301 y ese combate quedó desestimado. Tras ello, Sharabudtin Magomedov (nombre completo de Shara Bullet) llamó al propio Pereira para pelear, pero jamás recibió la respuesta del brasileño, quién llega en línea ascendente y con otros objetivos en mente.

Tras la primera cancelación fueron pasando las semanas y no aparecía un nuevo rival para el ruso. Sin embargo, de un momento a otro, la compañía firmó al brasileño Lutterbach para entrar a pelear directamente con Shara Bullett. Lutterbach es todo un buscavidas de las MMA y ostenta un amplio récord profesional de 38-10 cosechado en varias promotoras. No parecía el rival más duro, pero sí un hombre experimentado ante la oportunidad de su vida.

Dopaje y otro cambio de última hora

Pasaban los días, llegaba la ‘Fight Week’ del UFC FN de Arabia Saudí y todo parecía normal para Shara Bullet. Sin embargo, a último momento pasó algo tan poco habitual como increíble: Lutterbach publicó en redes que no podría pelear en Arabia Saudí. Al parecer, había estado tomando sustancias dopantes 3 meses antes de la pelea (cuando no había recibido la llamada de la UFC) y, al contrario de lo que él pensaba, aún sus análisis no estaban limpios y por lo tanto debía renunciar.

Con apenas dos días de margen y la casi obligación contractual de buscarle pelea a Shara Bullet, a la UFC se le ocurrió un plan tan loco como la persona que lo ha ejecutado. Antonio Trócoli, que debía pelear la semana pasada ante Aliskerov, se quedó sin rival tras la llamada del última hora que recibió el ruso para reemplazar al Chimaev en la estelar de este sábado.

Estando ya en Estados Unidos para aquel momento, Trócoli decidió quedarse unos días por la Costa Oeste del país y apenas con horas por delante, mientras comía este pasado jueves, recibió una llamada para cruzarse medio mundo e ir a pelear a Arabia Saudí. El brasileño aceptó el corto aviso y se puso en marcha.

La odisea de Trócoli

Casi con una cuenta atrás, Trócoli se dispuso a cruzar medio mundo para pelear en la UFC y enfrentar a una de las grandes estrellas de la noche. Cogió el primer vuelo que pudo y sin importar el ‘jet-lag’ ni nada, se dispuso a cumplir su sueño al precio que sea. Además, el brasileño tenía apenas 24 horas para bajar 13 libras (casi 6 kilos), para lo que cada minuto es importante, y por lo tanto, debía empezar a cortar peso en pleno vuelo (sin agua, sin comida y actividad para empezar la deshidratación).

La hazaña de Trócoli es de aplaudir antes incluso de entrar a la jaula. LLegó este mismo viernes de madrugada, y en la mañana dio el peso acordado pese a las dificultades, entrando así en la estelar del evento de Arabia Saudí. Además, para redondear una historia tremenda, Lutterbach, peleador al que va a sustituir, estará en su esquina durante la pelea con Shara Bullet, en lo que debería haber sido su debut en UFC.

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