Cuando se observa un pequeño MINI Cooper estacionado junto a un imponente Chevrolet Suburban, la intuición nos dice que el vehículo más grande ofrecería mayor protección en caso de colisión.
No obstante, un reciente estudio del Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras -IIHS- desafía esta percepción, demostrando que la creencia de que “cuanto más grande, más seguro” tiene un límite muy claro.
El peso y la seguridad: una relación compleja
El estudio del IIHS revela una realidad matizada:
Vehículos ligeros:
- En vehículos con un peso inferior al promedio de la flota, el riesgo de mortalidad de los ocupantes disminuye significativamente con cada 227 kilos adicionales.
Vehículos pesados:
- Por el contrario, en vehículos que superan el peso promedio, los beneficios de seguridad adicionales son mínimos.
- Es más, el aumento de peso en estos vehículos incrementa el peligro para los ocupantes de otros vehículos involucrados en colisiones.
La verdad sobre los SUV y pickups: Implicaciones para los conductores
“Para los conductores estadounidenses, existe la idea generalizada de que si más grande es más seguro, entonces aún más grande debe ser aún más seguro”, afirma David Harkey, presidente del IIHS. “Estos resultados demuestran que eso no es cierto en la actualidad. Ni para las personas que viajan en otros automóviles, ni, lo que es igualmente importante, para los ocupantes de los propios vehículos grandes”.
Evolución de la compatibilidad de colisiones
A lo largo de los años, el IIHS ha investigado la compatibilidad de colisiones, analizando cómo la interacción entre diferentes vehículos influye en la seguridad de sus ocupantes. El estudio actual examinó colisiones entre automóviles, SUV y camionetas de modelos recientes, abarcando los períodos 2011-16 y 2017-22.
Avances y desafíos
Mejoras significativas:
- La compatibilidad entre tipos de vehículos ha mejorado notablemente, gracias a los esfuerzos de los fabricantes para alinear las estructuras de absorción de fuerza y fortalecer las estructuras de los vehículos.
- Los SUV y camionetas son ahora considerablemente menos peligrosos para los ocupantes de automóviles que en el pasado.
Desafíos persistentes:
- A pesar de los avances, las camionetas pickup siguen representando un riesgo significativo para los conductores de automóviles, principalmente debido a su peso.
El peso como factor determinante
Con las estructuras de absorción de fuerza más alineadas, el peso se ha convertido en un factor crucial en la seguridad vehicular. El estudio encontró que:
Vehículos ligeros:
- El peso adicional en vehículos ligeros mejora la seguridad de sus ocupantes con un riesgo mínimo para otros.
Vehículos pesados:
- El peso adicional en vehículos pesados aumenta significativamente el riesgo para los ocupantes de otros vehículos.
La verdad sobre los SUV y pickups
“No hay nada mágico en los 1,814 kilos, excepto que es el peso promedio”, explica Sam Monfort, estadístico sénior del IIHS y autor principal del estudio. “Los vehículos que pesan más que el promedio tienen más probabilidades de colisionar con vehículos más ligeros que ellos, mientras que ocurre lo contrario con los vehículos más ligeros que el promedio. Lo que demuestra este análisis es que elegir un vehículo extra pesado no te hace más seguro, pero te convierte en un peligro mayor para otras personas”.
En consecuencia, los cambios en el peso de los vehículos influyen tanto en las mejoras de la compatibilidad como en las diferencias persistentes entre SUV y camionetas. La tendencia hacia vehículos más pesados, especialmente las camionetas pickup, plantea preocupaciones sobre la seguridad vial.
“Es un avance positivo que los automóviles y los SUV ahora tengan un peso más parecido”, concluye Harkey. “Estas cifras muestran que la transición a camionetas más livianas también podría tener grandes beneficios, especialmente porque muchos conductores no usan sus camionetas para transportar cargas pesadas”.
