Como muchas empresas que forman parte de la industria automotriz, Shell planea lograr su objetivo de convertirse en una empresa de energía con cero emisiones netas.
Para ello, la empresa está reduciendo las emisiones de sus propias operaciones, cambiando la combinación de productos energéticos que venden y desarrollando nuevos negocios de eliminación y reducción de carbono.
De igual manera, Shell pretende liderar la descarbonización del transporte como parte de sus planes de transición energética centrándose en varias áreas clave. Estos incluyen invertir en infraestructura de carga de autos eléctricos, desarrollar biocombustibles y soluciones de hidrógeno y colaborar con socios para acelerar la adopción de tecnologías bajas en carbono.
De igual manera, Shell está trabajando para mejorar la eficiencia de los motores de combustión interna y explorar combustibles alternativos para reducir las emisiones en el sector del transporte.
Concretamente, el objetivo central de la estrategia de Shell es convertirse en una empresa de energía neutral en emisiones para 2050. Este compromiso refuerza los esfuerzos globales para limitar el aumento de la temperatura promedio global a 1.5°C por encima de los niveles preindustriales, tal como lo establece el Acuerdo de París.
Acciones concretas para reducir emisiones
Como parte de este plan, Shell ha implementado diversas acciones para reducir sus emisiones de carbono y contribuir a la transición hacia un futuro energético más limpio. Estas acciones incluyen la reducción de emisiones en sus operaciones y productos energéticos, así como la expansión de su red de carga para vehículos eléctricos.
De este último punto destaca, el cierre y/o venta de 1,000 estaciones de gasolina (500 en 2024 y 500 en 2025), lo que significa que reducirá en poco más del 2% su número de gasolineras, que hasta 2023 sumaban 47,000.
Esta estrategia de reducir el número de gasolineras, se debe a que necesitaría encontrar espacio adicional o ampliar el tamaño de sus estaciones de servicio actuales para poder aumentar las estaciones de carga.
En un inicio, esta medida que forma parte de la estrategia de la compañía para ampliar su red de estaciones de carga y satisfacer la creciente demanda de autos eléctricos se centrará en China y Europa, donde el mercado de autos eléctricos está más desarrollado y la demanda de estaciones de carga públicas es alta.
La transformación de las gasolineras de Shell
Actualmente, Shell opera 54,000 puntos de recarga de autos eléctricos en todo el mundo, pero planea aumentar esa cifra a 70,000 en 2025 y a 200,000 en 2030. Para lograrlo, Shell buscará espacios adicionales en sus estaciones de servicio existentes o incluso ampliar el tamaño de estas estaciones para instalar más puntos de carga.
Además de instalar puntos de carga en sus estaciones de servicio existentes, Shell ha diversificado sus ubicaciones de carga para brindar mayor comodidad y accesibilidad a los usuarios de vehículos eléctricos.
Hoy en día, los cargadores de Shell se encuentran en otros puntos de carretera, “hubs de movilidad” y establecimientos como supermercados y centros comerciales. Esta estrategia permite a los conductores de autos eléctricos cargar sus automóviles mientras realizan sus actividades diarias, lo que contribuye a una mayor aceptación de la movilidad eléctrica.
A medida que la movilidad eléctrica continúa ganando impulso, es esencial que las empresas energéticas sigan el ejemplo de Shell y adopten estrategias similares para impulsar la transición hacia un futuro más sostenible.