Cómo hacer líquido para parabrisas casero: Pros y contras

| Actualizado:

La idea de usar ingredientes que ya se tienen en casa para rellenar el depósito del limpiaparabrisas es tentadora. Exploramos las ventajas, las serias desventajas y damos un veredicto claro sobre si este truco casero vale la pena.

Cómo hacer líquido para parabrisas casero Pros y contras

Para muchas personas, el mantenimiento del auto a menudo lleva a buscar atajos para ahorrar unos dólares, y una de las preguntas más recurrentes es si se puede fabricar un líquido limpiaparabrisas casero

La respuesta corta es que sí, se puede; la respuesta compleja, y la que realmente importa, es que quizás no deberías. Existe una diferencia fundamental entre una solución de emergencia y un reemplazo permanente, y es justo en esa línea donde esta práctica puede pasar de ser un ahorro a un futuro dolor de cabeza.

La promesa del líquido para parabrisas hecho en casa

El atractivo es innegable. Las recetas que circulan por internet suelen involucrar una mezcla de agua, un poco de vinagre blanco para la limpieza, y en ocasiones, alcohol isopropílico (isopropyl alcohol) para evitar la congelación en climas fríos. 

Algunos incluso sugieren una gota de jabón para platos para potenciar la eliminación de suciedad. En teoría, estos componentes atacan la mugre y los insectos pegados en el cristal (windshield), dejando una superficie clara para una conducción segura. 

La facilidad y el costo casi nulo son los grandes ganchos que capturan la atención de cualquier conductor que busque optimizar sus gastos. Pero la química detrás de un producto formulado profesionalmente es mucho más sofisticada de lo que parece a simple vista.

Una receta básica

A pesar de las advertencias, es útil conocer una fórmula básica para una situación imprevista donde no tienes otra opción. Utilizar esta receta con extrema precaución y solo como una solución temporal:

Importante: Nunca uses jabón para platos, amoníaco o agua del grifo. Esta mezcla no debe permanecer en tu vehículo por un tiempo prolongado.

Ventajas y desventajas

Para entender mejor el panorama, es útil visualizar los pros y contras de optar por una mezcla casera en lugar de un producto comercial.

Líquido para parabrisas más allá de la receta

Aquí es donde la decisión se vuelve más técnica. El vinagre, aunque es un buen limpiador, es un ácido. Su uso continuado puede degradar el recubrimiento transparente (clear coat) de la pintura alrededor de los aspersores y en el capó (hood). 

Igualmente, las delicadas gomas de las escobillas limpiaparabrisas (wiper blades) se resecan y agrietan con mayor rapidez al estar expuestas a esa acidez.

Por su parte, el jabón común no está diseñado para esto. Sus componentes pueden crear una espuma excesiva que el sistema no puede manejar, y peor aún, puede dejar una película que cause reflejos molestos, especialmente durante la noche o con la luz del sol de frente. 

Esto compromete directamente la seguridad. La recomendación de usar agua destilada en lugar de agua del grifo es válida, porque evita la acumulación de calcio y magnesio, pero ya empezamos a sumar costos y pasos a una solución que se suponía «sencilla». 

El verdadero peligro del líquido para parabrisas casero es el daño silencioso y progresivo. Una bomba de agua (water pump) obstruida o unas mangueras resecas son reparaciones mucho más costosas que los pocos dólares que cuesta una botella de líquido formulado.

¿Entonces, cuál es el veredicto?

Si se encuentra en una situación de emergencia, en un clima cálido y se necesita limpiar el parabrisas para salir del paso, una mezcla de agua destilada con una mínima cantidad de alcohol isopropílico podría funcionar temporalmente. Sin embargo, como una práctica regular de mantenimiento, el líquido para parabrisas casero no es recomendable.

Las fórmulas comerciales contienen solventes específicos que no dañan los materiales del auto, lubricantes para la bomba, y agentes anticongelantes probados a temperaturas exactas. El ahorro que se obtiene al hacer una mezcla en casa es mínimo en comparación con el riesgo que se asume. Proteger la pintura, las gomas y el sistema de limpieza del vehículo es una inversión inteligente.

Más Información

Salir de la versión móvil