Uno de los autos de carreras más históricos son los Silver Arrows o Flechas de Plata de Auto Union lo que hoy es Audi. Pero casi nadie sabe que esos los legendarios vehículos de competición de la década de 1930 también tenían planeada una versión deportiva homologada para la calle con un motor de 16 cilindros: el Auto Union Type 52.
Ahora, Audi ha fabricado este auto histórico, el Schnellsportwagen, que ha sido presentado al público por primera vez en la pasada edición del Goodwood Festival Speed celebrada a mediados de julio.
Volvamos a la época en que se imaginó el Auto Union Type 52: Auto Union AG, formada en 1932 a partir de la fusión de Audi, DKW, Horch y Wanderer, se involucró desde el principio en la competición automovilística. Y su nuevo logo, los cuatro aros, pasaron a ser rápidamente reconocidos en todo el mundo.
Ese mismo año se publicaron las normas para la nueva categoría de 750 kg utilizada en los Grandes Premios celebrados entre 1934 y 1936. En 1933, Auto Union AG encargó a la oficina de diseño de Ferdinand Porsche en Stuttgart el desarrollo de un auto de carreras para esta categoría.
Así, los trabajos en el Auto Union Type A (internamente Porsche lo llamó Type 22) comenzaron en marzo de 1933. Sólo un año después, Hans Stuck estableció un récord mundial conduciendo el vehículo en el circuito AVUS de Berlín. Cuando los innovadores autos de carreras de Auto Union y Mercedes-Benz irrumpieron en la escena del automovilismo internacional, nació la leyenda de las Flechas de Plata.
Rápidos como una flecha, estos legendarios modelos cautivaron al público con su diseño futurista y su tecnología revolucionaria. Mientras Mercedes-Benz se decantaba por los motores en posición delantera, Auto Union fue el primer fabricante en colocar el propulsor detrás del piloto.
Esta disposición del motor central sigue siendo la norma en la Fórmula 1 actual. En los años siguientes Auto Union estableció varios récords mundiales, ganó numerosas carreras de montaña, tres campeonatos alemanes y el campeonato europeo en 1936 con el avanzado Auto Union Type C.
Pocas personas saben que, mientras se desarrollaban los autos de carreras Grand Prix, Auto Union AG y la oficina de diseño de Ferdinand Porsche también planearon una versión deportiva homologada para la calle.
Todos los documentos conceptuales llamaban al vehículo “Schnellsportwagen” (deportivo de altas prestaciones), que era su nombre de comercialización previsto inicialmente. Hoy, con sus características distintivas, el auto se parece más a un Gran Turismo clásico.
Este Auto Union Type 52, como se conoció el proyecto, estaba destinado a clientes para participar en carreras de larga distancia, como la Mille Miglia; o en competiciones de autos deportivos, como las carreras de resistencia de Spa-Francorchamps o Le Mans. También se contempló la posibilidad de que fuera un auto de carreras de producción.
Ya a finales de 1933, la oficina de diseño de Porsche elaboró los primeros bocetos del vehículo, que tomaron una forma más concreta en 1934. Los responsables del proyecto decidieron construir un auto de pruebas; pero por lo que sabemos hoy, nunca llegó a materializarse. El proyecto se abandonó en 1935 y su rastro se perdió en los archivos de Audi y Porsche. Sin embargo, los técnicos e ingenieros dejaron sobre el papel mucho trabajo pionero.
Basado en la tecnología del auto de carreras que se desarrolló en la misma época, el Auto Union Type 52 se diseñó con un bastidor de escalera y el motor montado en posición central. Se utilizó la transmisión del Auto Union Type 22, pero se redujo la compresión del potente motor de 16 cilindros para que el coche pudiera funcionar con gasolina normal.
Al mismo tiempo, los ingenieros redujeron la relación de transmisión del sobrealimentador Roots. Con una cilindrada de 4.4 litros, el motor del Auto Union Type 52 proporcionaba alrededor de 200 hp a 3,650 rpm.
En comparación con el legendario auto de Grand Prix se redujo la potencia. Pero unas excelentes prestaciones, con una velocidad máxima de 124 mph (200 km/h) según los cálculos de los ingenieros, demuestran que el Schnellsportwagen habría hecho honor a su nombre. En su época, sería uno de los deportivos de calle y también uno de los vehículos de competición más potentes.