Sin embargo, la experiencia de viajar en un auto eléctrico es diferente a la de un vehículo convencional. Por lo tanto, es fundamental estar bien preparado para disfrutar al máximo de la travesía.
Viajar en carretera en un EV implica una serie de consideraciones que pueden marcar la diferencia entre un viaje exitoso y uno lleno de contratiempos. Uno de los aspectos más destacados es la necesidad de planificar las paradas de carga, ya que la autonomía de estos vehículos puede ser limitada en comparación con los automóviles de combustión.
A medida que los conductores se familiarizan con las estaciones de carga y su infraestructura, se dan cuenta de que, con un poco de organización, el proceso puede ser fluido y hasta agradable.
Con la preparación adecuada, cada parada puede convertirse en una experiencia enriquecedora. A continuación, se presentan algunos consejos prácticos que ayudarán a los conductores a tener una experiencia placentera y sin contratiempos.
Planificar el viaje
La planificación es fundamental cuando se viaja en un vehículo eléctrico. Antes de salir, es recomendable trazar un mapa del viaje que incluya las paradas de carga. Existen aplicaciones como Electrify America, que permiten localizar estaciones de carga y verificar su disponibilidad en tiempo real.
Dado que la red de cargadores varía en términos de velocidad y acceso, es útil tener un plan de respaldo. Esto significa identificar estaciones alternas en caso de que la primera opción esté ocupada o fuera de servicio.
Aparte, es importante familiarizarse con la autonomía del vehículo. Cada modelo tiene un rango específico, y conocerlo ayudará a evitar sorpresas desagradables durante el trayecto. Si es posible, es aconsejable agregar un 20% adicional al rango estimado para tener un margen de seguridad.
Conocer el vehículo eléctrico
Cada auto eléctrico tiene características únicas que pueden influir en la experiencia de viaje. Un aspecto esencial a considerar es la velocidad de carga. Algunos vehículos cuentan con funciones de preacondicionamiento que permiten calentar o enfriar la batería antes de cargarla, optimizando así la eficiencia.
Esto es especialmente útil en climas extremos, donde las temperaturas pueden afectar el rendimiento de la batería. Revisar el manual del propietario puede proporcionar información valiosa sobre estas funciones y cómo utilizarlas de manera efectiva.
Cargar y empacar
Antes de emprender el viaje, hay que asegurarse de que la batería esté completamente cargada. Esto no solo dará tranquilidad, sino que también maximiza la autonomía desde el inicio. En cuanto a la preparación, empacar lo esencial es clave.
Llevar bocadillos, cargadores de teléfono y otros artículos de confort puede hacer que las paradas sean más agradables. Aparte, tener entretenimiento a mano, como música o podcasts, puede ayudar a pasar el tiempo mientras esperas en las estaciones de carga.
Tener en cuenta el tiempo
Un aspecto que a menudo se pasa por alto es la relación entre el tiempo de viaje y las paradas para cargar. Los conductores deben ser conscientes de que el tiempo de carga puede variar, por lo que es recomendable incluir márgenes en el itinerario.
Los retrasos por tráfico son comunes, y sumarle el tiempo necesario para cargar puede ser un factor determinante para llegar a tiempo. Aprovecha estas paradas para estirar las piernas o disfrutar de un snack. Convertir las paradas en oportunidades de descanso puede hacer que el viaje sea mucho más placentero.
Carga eficiente de un vehículo eléctrico
Es inteligente aprender a cargar de manera eficiente. Se sugiere cargar la batería hasta un 80% en lugar de esperar a que esté completamente llena. Esto se debe a que la velocidad de carga tiende a disminuir después de alcanzar ese nivel, lo que significa que se pasará menos tiempo en la estación de carga. Al optimizar este proceso, se pueden minimizar los tiempos de espera y maximizar tu tiempo en la carretera.
Combatir el frío
Viajar en invierno presenta sus propios desafíos, especialmente para los vehículos eléctricos. Y es que las temperaturas frías pueden afectar la autonomía y el rendimiento de la batería. Por lo tanto, es vital estar preparado. Revisar los consejos específicos para climas fríos, que pueden incluir el uso de calefacción de la cabina con moderación y mantener la batería a una temperatura óptima.
Si es posible, planificar la ruta para evitar áreas donde las temperaturas sean extremas. Esto ayudará a preservar la batería y también hará que la experiencia de manejo sea más cómoda.
