Recientemente, la autoridad antimonopolio de Italia impuso una multa de 6 millones de euros a la empresa DR Automobiles por etiquetar incorrectamente automóviles de fabricantes chinos como de manufactura italiana.
Para entender esta situación, hay que mencionar que DR Automobiles ha estado comercializando autos chinos como Chery, BAIC y JAC bajo las marcas DR y EVO. Básicamente, su fórmula es comercializar sus autos como fabricados en Italia, pese a que la mayoría de su ensamblaje se realiza en China, dejando solo los toques finales para ser completados en Italia.
Claro está que esta práctica ha sido criticada por dar una impresión errónea sobre el origen de los automóviles, aprovechando la reputación de la industria automotriz italiana.
Esta sanción contra DR Automobiles no es un caso aislado, sino parte de una ofensiva más amplia del gobierno italiano. En meses recientes, las autoridades han tomado medidas similares contra otras empresas, como la confiscación de Fiat Topolino producidos en Marruecos que llevaban la bandera italiana y la obligada denominación del Alfa Romeo Junior, cuya fabricación se planeaba en Polonia.
Todas estas acciones reflejan una política más estricta destinada a proteger la integridad del “Made in Italy” y los empleos locales en la industria automotriz.
Prácticas comunes en la industria
Esta práctica de ensamblar parcialmente automóviles en Asia y completar el proceso en Europa es común en la industria automotriz. DR Automobiles ha defendido su estrategia, afirmando que nunca ha ocultado al público el hecho de que sus autos son preensamblados en China.
Según un portavoz de la empresa, entre el 60% y el 70% del ensamblaje se realiza en China, con modificaciones finales en Italia para cumplir con las regulaciones europeas, incluyendo sistemas de combustible y normas de colisión.
Tras recibir la multa, DR Automobiles ha anunciado su intención de apelar la sanción, argumentando que su publicidad nunca pretendió engañar al público sobre el origen de fabricación de sus vehículos.
No obstante, esta sanción puede tener implicaciones significativas para la empresa y la industria en general, subrayando la importancia de la transparencia y el cumplimiento normativo en la comercialización de productos.
Los autos chinos en la mira
Esta multa también llega en un momento en que la Unión Europea ha incrementado los aranceles sobre los vehículos eléctricos fabricados en China, buscando proteger a los fabricantes locales de la competencia extranjera de bajo costo.
Queda claro que la multa impuesta a DR Automobiles por etiquetar incorrectamente autos chinos como italianos es un claro ejemplo de la determinación del gobierno de Italia de proteger su industria automotriz y la autenticidad del “Made in Italy”.