¿Se puede comer carne el Sábado de Gloria y el Domingo de Resurrección?
Los días más importantes de la Semana Santa continúan. Te explicamos si se puede comer carne el Sábado de Gloria y el Domingo de Resurrección.
Los días más importantes de la Semana Santa continúan. Según la tradición católica, el Viernes Santo o Good Friday, en inglés, está marcado como un día de ayuno. Esto en conformidad con el artículo 110 de la Sacrosanctum Concilium, emanada por el Concilio Vaticano II.
Por día de ayuno se entiende no comer, o hacer una sola comida completa, aunque algunas personas suelen agregar dos colaciones, es decir, una comida más pequeña durante la mañana y otra durante la noche. Además, el Viernes Santo no se come carne, que inlcuye la que proviene de animales como pollos, vacas, ovejas o cerdos, así como aves, pero ¿el ayuno debe continuar durante el Sábado Santo y el domingo de resurrección? Te explicamos.
¿Se puede comer carne el sábado de gloria y el domingo de resurrección?
Al respecto, la Sacrosanctum Concilium señala que el ayuno debe celebrarse “en todas partes el Viernes Santo y, donde sea posible, se prolongue durante todo el Sábado Santo, para que las alegrías del Domingo de la Resurrección se alcancen con la mente elevada y clara”.
Por tanto, si se busca cumplir estrictamente, el Sábado Santo también debería continuar el ayuno y no se debería comer carne. En cuanto al domingo de resurreción, debido a la celebración, ya no se obligan ambas medidas.
Te puede interesar: Misas del Papa Francisco en Semana Santa 2024: Horarios, cómo y dónde ver en directo en USA
No obstante, el mínimo exigido según los preceptos de la Iglesia es ayunar y abstenerse de comer carne sólo el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo. De acuerdo con el artículo 110 de la Sacrosanctum Concilium, “se debe fomentar la práctica de la penitencia de la manera que sea posible en nuestro tiempo y en las diferentes regiones, y según las circunstancias de los fieles”. De acuerdo con la tradición católica, los viernes de Cuaresma tampoco se come carne y se recomienda el ayuno.
Según este mismo docuemento, la penitencia, incluido el ayuno, debe ser fomentado por las autoridades mencionadas en el art. 22. No obstante, también señala que “la regulación de la sagrada liturgia depende únicamente de la autoridad de la Iglesia, es decir, de la Sede Apostólica y, según determinen las leyes del obispo”.