¿Puede un ciudadano no estadounidense comprar una casa en USA?
Algunos trámites, como la compra de una casa o la solicitud de un préstamo hipotecario, suelen ser más complicados para los extranjeros.
Comprar una casa en los Estados Unidos puede resultar un proceso tardado, que requiere ciertos documentos, datos y verificación financiera. No obstante, éste se complica aún más para las personas extranjeras o que no son ciudadanas estadounidenses.
De acuerdo con Redfin, “cualquiera puede comprar y poseer propiedades en los Estados Unidos, independientemente de su ciudadanía. No existen leyes ni restricciones que impidan que una persona de cualquier nacionalidad extranjera sea propietaria o compre una casa en los Estados Unidos”.
Según el informe de las transacciones internacionales en bienes raíces residenciales de USA en 2023, de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por sus siglas en inglés), el 51% de los compradores extranjeros residen en Estados Unidos, incluyendo inmigrantes recientes y titulares de visas de no inmigrante.
Aunque los no ciudadanos sí pueden adquirir una vivienda en la Unión Americana, encontrar financiamiento, mediante un préstamo hipotecario, suele ser la parte más complicada, ya que, debido a los riesgos, algunas instituciones financieras no otorgan préstamos a extranjeros.
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Las dificultades para comprar una casa en USA si eres extranjero
Redfin señala que comprar una casa en los Estados Unidos como ciudadano no estadounidense es más simple si se planea pagar en efectivo. De lo contrario, es necesario obtener un préstamo hipotecario.
En el caso de los extranjeros, la dificultad para obtener un préstamo hipotecario dependerá de su estatus migratorio y estado de residencia, es decir, si planea o no vivir en USA.
Dentro de lo complejo del trámite, a una persona con tarjeta de residencia permanente (green card), un residente con visa de trabajo o un refugiado, le es más sencillo conseguir un préstamo que a un inmigrante indocumentado, quienes podrían necesitan un intermediario para poder comprar una casa.
Por otro lado, las instituciones bancarias requieren un historial crediticio. No obstante, en el caso de los no ciudadanos estadounidense, es probable que no cuenten con uno o haya poca información, por lo que los prestamistas no podrán determinar la solvencia ni analizar el riesgo de prestar dinero.
Debido a la complejidad del análisis de riesgos, muchos prestamistas simplemente optan por no prestar dinero a ciudadanos extranjeros.
Por si estas dificultades no fueran suficientes, los préstamos para extranjeros tienden requisitos más estrictos, como un pago inicial más alto, tasas de interés más altas, además de que se necesita contar con un Número de Seguridad Social o un Número de Identificación Personal del Contribuyente (INTN).