Desde que el Presidente Joe Biden encomendó a Kamala Harris la misión de abordar la migración desde los países del Triángulo Norte (El Salvador, Honduras y Guatemala), la vicepresidenta ha sido etiquetada de manera errónea como “la zarina de la frontera”, lo que le ganó un sinfín de críticas, especialmente, de los republicanos. Sin embargo, este jamás fue su rol.

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¿Por qué Harris no es “zarina de la frontera”?

Una vez que el presidente Biden asumió el cargo en enero de 2021, se enfrentó a un incremento significativo en el flujo de migrantes en la frontera sur del país, por lo que en marzo de ese mismo año, delegó a Kamala Harris la tarea de encargarse de las causas profundas de la migración desde el Triángulo Norte.

Durante su labor, Harris impulsó la inversión privada en los países del Triángulo Norte con el objetivo de reforzar sus economías y disuadir a los migrantes de viajar a Estados Unidos, creando nuevos como alternativas a la migración. Si bien esta medida rindió algunos frutos, no ha sido suficiente para frenar la crisis migratoria de la frontera sur.

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Dicho esto, el trabajo de Harris jamás fue encargarse directamente de la seguridad fronteriza o de detener cruces ilegales. Sin embargo, al estar a cargo de esta misión en específico, la vicepresidenta ha sido vinculada con “el mal manejo de la crisis fronteriza”, postura a la que le han sacado provecho sus críticos políticos y contrincantes, incluido el expresidente Trump, quien la ha señalado como la responsable de la crisis de migración en la frontera sur.

¿Cuál es el verdadero historial en inmigración de Kamala Harris?

El historial de Harris en inmigración es más complejo de lo que se habla. De acuerdo con analistas políticos de Telemundo, el enfoque de inmigración de Harris es de largo plazo, lo que ha impedido producir resultados inmediatos visibles y, por ende, ha desatado críticas de sus contrincantes.

No obstante, sus partidarios destacan su liderazgo en atraer inversiones a una región con grandes desafíos económicos. Según Ricardo Zúniga, exfuncionario del Departamento de Estado especializado en el Triángulo Norte, Harris ha utilizado su posición para generar confianza entre inversionistas, buscando reducir la migración a través del desarrollo económico.

Sin embargo, hay críticos que sostienen que Harris pudo haber adoptado una postura más contundente y efectiva en el corto plazo. Asimismo, hay quienes se cuestionan la efectividad de Harris en presionar a México y a los países del Triángulo Norte para que refuercen sus políticas de inmigración. Ante ello, la vicepresidenta no ha hecho más que defender su trabajo y señalar a Trump por “hablar de la seguridad fronteriza sin tomar acciones concretas”.

En temas de migración, las promesas de campaña de Harris incluyen contratar a más agentes fronterizos y combatir el tráfico de drogas y personas.

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